Por: Elko Omar Vázquez Erosa
Hoy en la tarde el cielo comenzó a tronar muy fuerte y Amy me dijo que tenía mucho miedo.
—No te preocupes —le dije—, es el dios Thor que está golpeando las nubes con su martillo para sacar chispas y que caiga la lluvia para que estés fresca.
—¿Y po’ qué etá ese seño allá arriba, tío?
—Yo creo que estaba aburrido.
—¡Abuelita! ¡Abuelita! Ariba ta’ un señor haciendo ese ruido.
—No, mami, no le hagas caso a tu tío —dijo mi mamá—, está jugando. Es un fenómeno natural que consiste en…
Y comenzó una pesada disertación que, por supuesto, no entendió Amy.
Digo, si va a la escuela católica, por aquello de equilibar, ¿por qué no enseñarle un poco de Asatrú?