Por: Elko Omar Vázquez Erosa
Asumo que usas lentes; pero si no los usas puedes adquirirlos, por un módico precio, en cualquier supermercado, o en una página china.
El siguiente paso es robarle a tu mamá, a tu tía o a tu hermana, o a quien se deje, un ejemplar de la revista Vanidades (de preferencia una edición antigua para que puedas leer alguno de los divertidos relatos de Elizabeth Subercaseux).
Vamos a recortar un ojo de la revista (de preferencia dos ojos derechos o dos ojos izquierdos, y para ello mediremos el tamaño del área a recortar, utilizando nuestros lentes, como se muestra en las imágenes 1 y 2). Esto es importante para que obtengas el aspecto de un imbécil absoluto y total, lleno de contento con el sistema y con tu jefe, de tal forma que no sospeche de ti.
Practicamos unos agujeritos en los ojos falsos, por si nos hablan desde la cámara o viene algún cliente fastidioso y tienes que abrir los ojos un momento.
Fijamos los ojos con cinta transparente y el resultado final se muestra en la imagen 3.
Te pones una pluma o el ratón de la computadora en la mano, o abres un documento y haces como que lo estás estudiando…
Quizá un día les explique cómo maquillarse para burlar cámaras de seguridad.