Por: Elko Omar Vázquez Erosa
Los gallegos, pueblo colonizador de quienes me enorgullezco en descender únicamente son pendejos en los chistes mexicanos, chistes que por otro lado le encantan a los gallegos, lo que habla mucho de su generosidad y buen humor.
El caso es que la Ratona me ha pasado una receta gallega muy secreta, que a continuación os transmito.
Entre los ingredientes se vuelve preciso contar con El Necronomicón, de Abdul Al-Hazred, cuatro papas, de preferencia cambray (no conseguí), sal (para mantener lejos a los antiguos), un hacha y un pulpo de los mares de Hali.
Se procederá a recitar el encantamiento de Cthulhu para abrir las esferas, mismo que reza:
¡Iä! ¡Iä! ¡Cthulhu fhtagn! Ph´nglui mglw´nafh Cthulhu R´lyeh wgah-nagl fhtagn.
Te podrías traer en tu I-Pod cualesquier canción de mi esposa de una dimensión alternativa, Britney Spears, para que los perros de Tíndalos, que sobrevuelan los mares de Hali, no te olfateen y se distraigan.
Procederás a atrapar pulpos frescos de los mares de Hali y dibujando el sello de Salomón, con una antorcha hecha de mujeres vírgenes sacrificadas a Dagón, volverás a esta realidad.
Si se te hace muy pesado atrapar los pulpos de Hali puedes ir a Walmart y comprar unos pulpos de tu planeta, total que no hay mucha diferencia entre el sabor de los de Hali y los de aquí.
Bueno, una vez librado ese problema colocas el hacha en la barrita de tu cocina (el hacha es para impresionar) y lo metes a una cacerola, en la que no pondrás agua ni aceite, para que no se vayan a cerrar los portales. No te preocupes, el pulpo soltará agua, pero es muy importante que al principio lo muevas mucho para que no se te pegue.
Agregas sal al gusto, y las papas.
Tomas el hacha y haces en el aire el signo de Koth.
Posteriormente, y una vez que el pulpo haya soltado agua metes las papas debajo del susodicho artrópodo y bajas a fuego lento. Lo tapas y lo dejas unos 20 minutos, mientras salmodias:
¡Iä! ¡Iä! ¡Cthulhu fhtagn! Ph´nglui mglw´nafh Cthulhu R´lyeh wgah-nagl fhtagn.
No se te olvide poner una canción de Britney Spears para que los perros de Tíndalos no te vayan a oler.
El pulpo y las papas se cortan, picaditos, y se sirven en un plato grande, guiso que sin lugar a dudas te gustará.