Por: Elko Omar Vázquez Erosa
Comenzaron a asomar tus lágrimas y las mías se fueron enredando con las tuyas cuando las horas dejaron de existir.
Acaso pensaba disolverme con el tiempo. Te tenía ahí, sin poder abrazarte, sabiendo que ya nunca habría de fundirme en las verdes luces de tus ojos. Me apretabas las manos para consolarme, sin la promesa de ningún futuro, de ningún mañana, a tu lado.
Modelo: Janet Vera.

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