Por: Elko Omar Vázquez Erosa
Busco la condición primera
de la infancia,
el muérdago del druida
y los cristales de la luna.
Tú, diluida siempre,
brebaje oscuro de las musas
tallado en signos incomprensibles
que quisiera beber hasta la locura.
Tú, la impronunciable,
la que siempre niega,
balada mágica del cuervo
y del ensueño.