Por: Elko Omar Vázquez Erosa
Es una tarde nublada,
la brisa juega
con las espadañas y las hojas.
Leo en las páginas prohibidas
de tu alma, enciendo un cigarrillo
y miro cubrirse de lluvia las montañas.
La pradera lastima,
un musgo esmeralda se adhiere
a la corteza de los árboles
despertando mis momentos sagrados,
lo momentos que para ti son nada.
Imagino que serán hermosas las tardes lluviosas en El Refugio y nostálgicas pensando en el amor.
Saludos.
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Un fuerte abrazo, Crazy Love. Sigo castigado en Facebook.
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Ni hablar!
Te hace bien.
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