Por: Elko Omar Vázquez Erosa
Al posar
nuestros ojos de ambición
en las joyas del cielo,
aquello olía a eternidad…
Nos vinieron ganas
de dormir,
como larvas de sueño bajo tierra,
en lo oscuro.
Eres eterna porque brillas en el oro,
porque tu risa permanece fugitiva,
robándome la calma.
Nunca te fuiste
—pero te quedaste—
invadiste mis sueños
con alas de nostalgia.
Quise decirte que yo te amaba
de mil maneras,
cuando empeñada en llevarte
las palabras…
Se me fueron durmiendo
los sentidos,
disminuyendo de mi pecho
los latidos.
Para burlar el tiempo cerré los ojos,
me fui a dormir encapsulado,
como larva de sueño bajo tierra,
en lo oscuro.
Modelo: Janet Vera