Por: Maribel R.
(Especial de Noche de brujas)
I
Por fin el día más esperado. Llegué un poco nerviosa, pero con una alegría inmensa por poder estar allí entre los finalistas. Hacía un sol radiante: bajé y respiré profundo. Era un hotel con un hermoso jardín y una enorme terraza que ya estaba dispuesta con todos los útiles de cocina para el gran concurso.